domingo, 2 de noviembre de 2008

ARTE CON LECTORAS

Allá por junio del 2007 Cristina proponía su magnífica idea de LECTORAS CON ARTE diciendo aquello de: “Mis queridas lectoras. Doy un paso más. Voy a ir colocando imágenes de cuadros en las que las protagonistas son mujeres leyendo. A ver qué se os ocurre”.

Pues ahora yo, en esta época de cr.s.s… (¿quién dijo crisis?), vengo a proponeros otro pasito más. ¿Qué os parece ir colocando otras expresiones del arte con las mísmas protagonistas, mujeres leyendo? Yo me lanzo, y en honor de nuestra más ilustre inspiradora he jugado con sus mísmas palabras para nombrar esta nueva entrada: ARTE CON LECTORAS.

Aprovechando las ventajas del camino que ya llevamos recorrido juntas, huelga decir que sólo se trata de disfrutarlo si lo queremos y de quererlo sólo si lo disfrutamos.

Y con ustedes,tachán,tachán...!!:







"Elisa leyendo".

280 x 280 x 280 cm.

Pza. de las Batallas (Valladolid).

2002

Obra en bronce de la escultora Belén González.

La escultura, toma como modelo a la hija de la autora, llamada Elisa, y representa a una adolescente sentada con las piernas cruzadas mientras porta un libro entre las manos.

En concreto, lee un fragmento de “Sara de Ur”, de José Jiménez Lozano, con lo que se pretende ilustrar la dimensión universal de la cultura.

Sus medidas son 2,80 metros de altura y la misma cifra de anchura, de manera que la escala supone unas cuatro veces el tamaño natural, mientras que el peso ronda los 1.400 kilogramos. Tan enorme tamaño obedece al deseo de que los niños puedan subirse a ella para sentarse y jugar, ya que se sitúa a ras de suelo sin ningún tipo de peana.

La fundición, realizada a la arena, tuvo lugar en Madrid.

Nacida en Valladolid, Belén González es licenciada en Bellas Artes por la Universidad Complutense y en Historia del Arte por la de su ciudad, donde reside y posee su taller. Con anterioridad, ha desarrollado su carrera en Madrid –donde también tiene un taller-, Cáceres y Medina del Campo. Entre su obra expuesta en público, hay que citar la figura de Vicente Escudero en el Campo Grande; la Pendiente del Reloj en Palma de Mallorca; Juegos de Pelota en Laguna de Duero, y el Nadador ubicado en La Cistérniga.

Algunas entidades que custodian sus creaciones son la Junta de Castilla y León, las Diputaciones de Valladolid, Cáceres y Huelva; las Universidades de Alcalá de Henares y Valladolid, así como el Museo Municipal de Valdepeñas (Ciudad Real).

7 comentarios:

Anónimo dijo...

¿Sola?.No
Leo.

rocio dijo...

Muy bien María-sur. Magnífica la escultura pero más tu idea de ponerla.

Cristina dijo...

"...Poco después, su mirada se posó en una cajita de cristal que había debajo de la mesa. La abrió y encontró dentro un diminuto pastelillo, en que se leía la palabra «COMEME», deliciosamente escrita con grosella. «Bueno, me lo comeré», se dijo Alicia, «y si me hace crecer, podré coger la llave, y, si me hace todavía más pequeña, podré deslizarme por debajo de la puerta. De un modo o de otro entraré en el jardín, y eso es lo que importa.»
Dio un mordisquito y se preguntó nerviosísima a sí misma: «¿Hacia dónde? ¿Hacia dónde?» Al mismo tiempo, se llevó una mano a la cabeza para notar en qué dirección se iniciaba el cambio, y quedó muy sorprendida al advertir que seguía con el mismo tamaño. En realidad, esto es lo que sucede normalmente cuando se da un mordisco a un pastel, pero Alicia estaba ya tan acostumbrada a que todo lo que le sucedía fuera extraordinario, que le pareció muy aburrido y muy tonto que la vida discurriese por cauces normales.
Así pues pasó a la acción, y en un santiamén dio buena cuenta del pastelito.
-¡Curiorífico y curiorífico! -exclamó Alicia (estaba tan sorprendida, que por un momento se olvidó hasta de hablar correctamente)-. ¡Ahora me estoy estirando como el telescopio más largo que haya existido jamás! ¡Adiós, pies! -gritó, porque cuando miró hacia abajo vio que sus pies quedaban ya tan lejos que parecía fuera a perderlos de vista. ¡Oh, mis pobrecitos pies! ¡Me pregunto quién os pondrá ahora vuestros zapatos y vuestros calcetines! ¡Seguro que yo no podré hacerlo! Voy a estar demasiado lejos para ocuparme personalmente de vosotros: tendréis que arreglároslas como podáis... Pero voy a tener que ser amable con ellos -pensó Alicia-, ¡o a lo mejor no querrán llevarme en la dirección en que yo quiera ir! Veamos: les regalaré un par de zapatos nuevos todas las Navidades.
Y siguió planeando cómo iba a llevarlo a cabo:
-Tendrán que ir por correo. ¡Y qué gracioso será esto de mandarse regalos a los propios pies! ¡Y qué chocante va a resultar la dirección!
Al Sr. Pie Derecho de Alicia
Alfombra de la Chimenea,
junto al Guardafuegos
(con un abrazo de Alicia).
¡Dios mío, qué tonterías tan grandes estoy diciendo!
Justo en este momento, su cabeza chocó con el techo de la sala: en efecto, ahora medía más de dos metros."

Elisa estaba tan absorta en su lectura, que no se dió cuenta que su cuerpo se transformaba a la vez que el de Alicia en el país de las maravillas...

Maria-Norte dijo...

Que maravilla esto de crecer y crecer y tener alguien que nos ponga los zapatos y nos ayude a elegir que modelito va mejor y donde comprarlos y como atarlos.
Pero que grande es "HOYLIBRO".
Un besazo y me da mucho gustito decir que ... hasta mañana.
Maria-Norte

Anónimo dijo...

Quieta.
Leyendo la vida al pasar. Hojas secas del otoño, luz primaveral. El abuelo que se acerca y cuenta a su nieto las historias de Sara y Abraham. Jóvenes curiosos preguntándose dónde caerá Ur. Y ..¡Oiga, el dueño de este perro, que se me mea encima!.
Y otra vez esta pareja discutiendo.
¡Otra vez!.Siempre lo mismo.”Si no es malo –me dice ella al ver que observo- es que es como un niño grande”

¿Un niño grande?. Un niño grande soy yo, tonta.¿Me oyes?
¡Pena de esta capa de bronce!
¡Que un niño grande es eso, un NIÑO que es grande!
Y el adulto que no crece, ¡un inmaduro!.¿Te enteras?
¡Huye tú que puedes!

Quieta.Leyendo la vida al pasar….
Mientras, James Matthew Barrie se divierte inventando-¿inventando?-personajes.

Maria-Norte dijo...

Me molesta darle razón, pero en este caso la razón la tiene mi madre, por un rato me he olvidado de que soy Elisa, una adolescente incomprendida y aburrida y me he convertido por la gracia de un libro en Sara y he estado en el antiguo Oriente, viviendo con mis cabras, he viajado a Egipto y he comprado a los mercaderes joyas y sedas maravillosas. Dios mio!! si hasta me han regalado un elefante.
Voy a hacer caso a mi madre, porque efectivamente con los libros se abre un mundo diferente, un mundo en el que quiero estar siempre y si nó que me convierta en estatuta.
Maria-Norte

Pilar dijo...

Pulcritud. Para ser exactos "¡qué pulcritud!". Eso fue lo primero que oyó cuando la instalaron en una calle extraña, de una ciudad extraña, lejos del calor y el olor que el taller de su creadora genera y alimenta. ¡Qué pulcritud!. Se lo escuchó a una mujer vencida por unos años que apoyaba torpemente en un bastón comprensivo. La observó desde arriba, con disimulo, como si estuviera reconcentrada en el libro que descansaba en sus enormes manos. Nunca la ha vuelto a ver. Nunca ha vuelto a escuchar halago similar. Añoranza de un estado que insolidarias palomas se encargaron de matar.