sábado, 1 de noviembre de 2008

POR ALGO ERES CANDELA

“Sale y entra y se mueve y su hacer la ilumina”. (Circe Maia)
Hace unos meses,en junio,con motivo de mi cumpleaños os contaba algo.Así que fiel a mis palabras, hoy debo felicitarme.
Porque tal día como hoy,de hace 16 añitos ya, una adorable criaturita vió la luz. La mísma que espero poder seguir iluminando muchos años más. Y la mísma que con su sonrisa, su mirada o su silencio aporta todavía más luz a todos y cada uno de mis días. Muchas la conoceis por María. ¡Pero por algo se llama Candela!

6 comentarios:

Maria-Norte dijo...

10 Reglas para salir con mi hija

Regla nº 1:
Si aparcas delante de casa y tocas la bocina, será mejor que vengas a entregar un paquete, porque no conseguirás otra cosa.

Regla nº 2:
No tocarás a mi hija delante de mi. Puedes mirarla siempre y cuando no sea fijamente y siempre por encima de su cuello. Si no eres capaz de mantener tus ojos y tus manos alejadas del cuerpo de mi hija, sencillamente te los arrancaré.

Regla nº 3:
Estoy enterado de que la gente de tu edad considera muy moderno llevar los pantalones tan flojos que parece que se les vayan a caer en cualquier momento. Por favor no lo consideres como un insulto, pero tanto tú, como el resto de tus amigos sois completamente idiotas. Aun así, deseo ser agradable y abierto de miras acerca de este asunto, así que te propongo el siguiente compromiso: Puedes venir a mi casa enseñando la ropa interior y con pantalones diez tallas más grande, y no me opondré. Sin embargo, y para asegurarme de que tus pantalones no se bajan "accidentalmente" durante la cita con mi hija, cogeré mi martillo eléctrico y te los fijaré firmemente a la cintura.

Regla nº 4:
Estoy convencido de que estás informado de que en el mundo actual, el sexo sin usar "métodos barrera" de cualquier clase puede matarle. Permíteme explicarle: hablando de sexo, yo soy la barrera, y sí: puedo matarte.

Regla nº 5:
Está comúnmente asumido que para conocernos, hablaremos de deportes, política y otros temas de actualidad. Por favor, ni lo intentes. La única información que necesitas darme es la hora en la que traerás a mi hija de vuelta a casa sana y salva, y la única respuesta que procede es: "temprano"

Regla nº 6:
No tengo duda de que eres un tipo muy popular, con muchas oportunidades para quedar con otras chicas. Me parece muy bien, siempre y cuando le parezca bien a mi hija. Aparte de eso, desde el momento en que salgas con mi hijita, no saldrás con ninguna otra chica más hasta que ella decidida acabar la relación. Si la haces llorar, yo te haré llorar.

Regla nº 7:
Si permaneces en la puerta de mi casa más de una hora esperando a que mi hija aparezca, no llores ni suspires. Si quieres llegar a tiempo para la película, mejor no conciertes una cita. Mi hija se estará maquillando, un proceso que puede durar tanto como pintar la Gran Muralla China. En vez de quedarte ahí parado, ¿por qué no haces mientras algo útil, como cambiarme el aceite del coche?

Regla nº 8:
Los siguientes lugares no son apropiados para una cita con mi hija:
- Lugares donde haya camas, sofás u cualquier otra cosa más suave que un taburete de madera
- Lugares donde no haya padres, policía o monjas a la vista
- Lugares oscuros
- Lugares donde haya gente bailando, de la mano, o alegre
- Lugares donde la temperatura ambiente sea suficiente como para que mi hija desee vestir pantalón corto, bañador, top o cualquier otra cosa que no sea un jersey de cuello vuelto bajo un anorak de pluma abrochado hasta la boca.
- Las películas con alto contenido romántico o sexual también están prohibidas, las películas en las que aparezcan sierras eléctricas están bien.
- Los partidos de hockey están bien

Regla nº 9:
No me mientas. Puedo parecer viejo, calvo, idiota y mentecato. Pero en lo que concierne a mi hija soy el todopoderoso y omnisapiente Dios del Universo. Si te pregunto a dónde vais y con quién, solo tendrás una oportunidad para decirme la verdad, toda la verdad y nada más que la verdad. Tengo una escopeta, una pala y cien metros de terreno detrás de casa. No juegues conmigo.

Regla nº 10:
Ten miedo, mucho miedo. Podría confundir fácilmente el sonido de tu coche en la calle con el de un helicóptero de combate acercándose sobre un campo de arroz cerca de Hanoi. Cuando creo oler a charlies, las voces de mi cabeza me ordenan que ponga el armamento a punto mientras espero a que traigas a mi hija a casa. En cuanto llegues, deberás salir del coche con las manos en alto bien a la vista, decir el santo y seña, gritar alto y claro que has traído a mi hija a casa a su hora, después volverás a tu coche - no es necesario que entres en mi casa. La cara que verás en la ventana, pintada con colores de camuflaje, es la mía

Mejor que no lo lea Candela porque me va a odiar.
Un beso
Maria-Norte

Cristina dijo...

Candela... Llama que convierte en mágicas siluetas anaranjadas a todos los que a ella se arriman, invitándolos a confidencias, a la risa y la alegría, convirtiendo la noche en día y el frío en calor. Candela... en Cuba "Ser Candela" es ser ingeniosa y astuta. Digna hija de su madre.

Pero la Candela se apaga si alguien no se esmera en poner tronquitos del tamaño exacto para que no dé ni demasiado calor ni demasiado frío. Por eso, felicidades a las dos, Candela y candelera, y que sigáis calentando nuestros corazones.

Anónimo dijo...

¡Ay María! Odiarnos no! Pero algo odiosas creo que sí.
Como viejas, calvas o idiotas, no! Pero algo injustas y mentecatas,seguro.
¿Quién no se ha sentido incomprendida a los dieciséis?
¿Quién no se ha preguntado cómo es posible que quienes más te quieren te lo pongan todo tan difícil?
¿Quién no se ha reido de aquello de que ya lo entenderás cuando seas mayor?
Y se llora.Y se mira a la luna con melancolía.Y los ponemos verdes.
Y los desafiamos.Los más valientes a la cara.Otros a escondidas.
Y nos creemos dueños de nuestra propia vida…y…y…

Y pasan los años.Y te sigues sintiendo incomprendida.Sólo que ahora hay alguien que te echa en cara lo mísmo.
Y pasan los años y sigue habiendo quien te quiere y te lo pone difícil.Sólo que ahora hay alguien que te reprocha tanta dificultad.
Y pasan los años y te das cuenta de que ni siquiera ahora eres tan mayor. Sólo que ahora hay alguien a quien sí se lo pareces.
Y pasan los años y seguimos sin ser tan dueños de nuestra propia vida. Sólo que ahora hay alguien que cree que encima pretendemos serlo de la suya….

Y pasan los años. Y los míos. Y recuerdo mis dieciséis con alegria. Y estoy contenta. Y estoy segura de que las manos de mis arqueros siempre apuntaron y apuntan para mi felicidad.

(Y perdona si me repito con K.Gibran, no recuerdo si ya os lo puse alguna vez, pero me gusta tenerlo presente):
"TUS HIJOS"
Tus hijos no son tus hijos
son hijos e hijas de la vida
deseosa de sí misma.
No vienen de ti, sino a través de ti
y aunque estén contigo
no te pertenecen.
Puedes darles tu amor,
pero no tus pensamientos, pues,
ellos tienen sus propios pensamientos.
Puedes abrigar sus cuerpos,
pero no sus almas, porque ellas,
viven en la casa del mañana,
que no pueden visitar
ni siquiera en sueños.
Puedes esforzarte en ser como ellos,
pero no procures hacerlos semejantes a ti
porque la vida no retrocede,
ni se detiene en el ayer.
Tú eres el arco del cual, tus hijos
como flechas vivas son lanzados.
Deja que la inclinación
en tu mano de arquero
sea para la felicidad.
(Khalil Gibran)

Anónimo dijo...

ssssss, María, ¿no acabas de ver como un millón de chispas anaranjadas saltando por aquí?

ssssss, es nuestra candelera-master, ¡avivando nuestras fogatillas!,¡qué calorcito tan bueno!,¿verdad?

Maria-Norte dijo...

Que rico, mmmmmmmmmmmmmmmmmmmm

Pilar dijo...

León Tolstoi escribió: "El niño reconoce a la madre por la sonrisa".
Me pregunto si Candela no supo que tú eras tú antes de mirarte a los ojos por vez primera.
Felicidades a las dos porque la una sin la otra no hubierais podido nombrar jamás las palabras "madre" e "hija". ¿Hay algo mejor y más auténtico en la vida?