sábado, 21 de junio de 2008

OPINIONES SOBRE CHESIL BEACH, DE IAN MCEWAN



RESULTADO DE LA ENCUESTA EN EL BLOG:
VOTOS: 9
BUENÍSIMO: 0
BUENO: 3
REGULAR: 4
MALO: 2

Comenzamos con el debate bien avanzada la cena y con nuestros regalitos colocados.

Abre el debate ELENA, por haber propuesto el libro ella. Dice que le pasó al leerlo como a Pililebe la vez anterior, el ya clásico "me gusta, no me gusta...", y que no lo recomendaría más, lo que nos reafirma en la decisión que tomamos el mes anterior de que no se propongan libros que no se han leído. "Se deja leer", dice como conclusión. Destaca que plasma muy bien el sentimiento que tienen los protagonistas por alcanzar la madurez, pero que el final no está bien resuelto (esa impresión es unánime), parece como si tuviera prisa por terminarlo. También cree que refleja muy bien la psicología de la mujer, y no tan bien la del hombre.

A MARÍA SUR le ha gustado regular. Cree que el libro se basa en la incomunicación, y que los hombres se toman las cosas más a la ligera y las mujeres buscan excusas. No lo recomendaría.
A PEPA no le ha gustado, le parece demasiado descriptivo y a ratos esa meticulosidad le ha angustiado.
ISABEL tampoco ha disfrutado con la lectura, y con el final menos.
ROCÍO está también en el grupo de las que no le ha gustado, cree que es "muy british", demasiada frialdad en los sentimientos, incomunicación, cree que los latinos somos distintos.
MARÍA DEL MAR cree que el autor escribe muy bien, aunque no le ha gustado a pesar de que piensa que el vocabulario es exquisito.
MARGA es de las pocas a las que le ha gustado mucho. Su tipo de escritura y las descripciones provocaron que se metiera más en el libro. Cree que lo explica todo muy bien, aunque nota un vacío al explicar la relación que tiene ella, Florence, con su padre, cree que hay algo en esa relación, una escena en el barco, que ha provocado la frigidez de ella, y eso precisamente lo deja en el aire. Aquí se abre el debate porque eso lo han notado unas cuantas, aunque Rocío dice que sí está explicado, y que Florence quiso borrar esa parte de su pasado.
Algunas creen que ella es una enferma patológica de la frialdad, y que su superioridad social también queda poco clara.
Rocío opina que el bloqueo mental que tiene ella ha provocado que se eche a perder una relación estupenda. Yo, Cristina, creo que la relación entre ellos no era tan estupenda, no se conocían de nada, se casaron creyendo que estaban enamorados pero las distancias entre ambos eran enormes, y su incomunicación era total.
MARÍA NORTE, vía móvil, también participa en el debate, y opina que no le ha gustado mucho, y le ha costado ubicarla temporalmente.
CRISTINA piensa que el autor no deja ningún espacio para la imaginación del lector, las 40 primeras páginas son una cena ¡sin postre!, y a ella le gusta poner algo de su parte. Luego, sin embargo, pasan 40 años de la vida en tres páginas. Cree que el ritmo de la novela no está bien elaborado. Tampoco le parece creíble que él, teniendo tiendas de música, aunque sea más aficionado al pop, no haya leído nada del éxito del cuarteto de ella. Y sobre todo, está de acuerdo en que la frigidez de ella es producto de algún tipo de experiencia desagradable que pasó entre su padre y ella en el barco, y que el autor deja sin clarificar.
PILILEBE dice que le ha encantado, la ha recomendado e incluso la ha regalado, aunque ella hubiera terminado la novela en la playa. Cree que el autor tiene una gran facilidad en describir sensaciones, ausencias, presencias. Sobre los abusos del padre cree que no los hubo, porque su experiencia (hizo un documental sobre los abusos sexuales en el ámbito familiar y se entrevistó con muchas víctmas) le dice que las mujeres que lo han sufrido pecan de lo contrario, en el 90% de los casos buscan el amor y lo practican de forma más promiscua. Cree que simplemente Florence es una mujer extraña, que ha crecido en un ambiente muy particular.
A ADELA le ha gustado en algún momento y en otros no. Recordó que una amiga que ella tenía le contaba una experiencia similar a los 19 años, la ha reconocido en el libro e incluso pensó en llamarla, y que no cree que eso sea "british", tambien le pasa a muchos españoles. También piensa que la agresividad de él es producto de la ansiedad que le provoca la situación.
ÁNGELES piensa que describe muy bien la situación, le ha gustado todo menos el final.
En definitiva, casi todas pensamos que el libro se centra en LA INCOMUNICACIÓN DE UNA PAREJA. Una de las cosas que se debate también es que hay que tener en cuenta el momento histórico que narra, porque unos años después cambia todo, ellos son los "últimos de Filipinas" en ese tipo de relaciones en las que el matrimonio traía la liberación de la casa paterna, y que era una forma de alcanzar la madurez. Más tarde esos yugos se liberan y ya se producen relaciones más libres. Y que ahora, el problema que sufre Florence incluso puede ser tratado por profesionales, aunque entonces se sufría en silencio, como las hemorroides (eso lo digo yo, que pa eso soy blogmaster por el momento, hasta que el viento de levante me arrastre y me separe del teclado donde estoy agarrada desde ayer).
Abur.

2 comentarios:

pepa dijo...

la verdad que el viernes salí de la cena con muy buenas sensaciones, no solo por la cerveza, sino x lo interesante q es comentar los libros en un grupo, sobre todo xq yo me senté en la silla pensando q el libro no me gustó, y despues de escuchar a marga y a pillebe me levanté de la silla diciendo "joder" q tienen muchisima razón. En fin, q espero q celebremos muchos aniversarios para enriquecer mutuamente nuestras cabecitas.

Anónimo dijo...

Qué razón Pepa.
Y qué suerte la nuestra.
Edmund Wilson ( escritor y crítico literario) afirmaba que “no hay dos personas que lean el mísmo libro”. Ahora, cuando nosotras leemos ya no lo hacemos con un “par de ojos” sino con diez o quince ¡ y hay que ver lo mucho que se puede llegar a ver! ¿verdad?.

Y para corroborar lo dicho, otra cita, de Igor Stravinsky (compositor musical), que podríamos aplicar a la lectura: “ demasiadas obras concluyen mucho después del final”. Como nuestros libros...